// Un espectáculo del absurdo

Tabla de Contenido

La disparatada y no menos espeluznante aventura a bordo de los vagones psiquiátricos de TransMilenio Pag. 25
Chupalina punketa y alta tensión con enfermera en la Plazoleta de Las Nieves Pag. 37
Mi traga maluca con la actriz María Eugenia Dávila Pag. 44
Cuando la casa de La estrategia del caracol fue tomada por un cura rojo
y una monja falsa Pag. 49
De tangos, tintos, copas y coperas en El Mercantil, el último café de los jubilados Pag. 56
Clásica Baquero, la antigua barbería que sobrevive en el histórico barrio Las Cruces Pag. 64
El maestro de la radio que se agarraba a trompadas en el viejo barrio San Bernardo Pag. 70
El lento, dramático y doloroso funeral del antiguo restaurante La Normanda Pag. 83
Un zurrungueo de tiple en el taller del último luthier de la antigua calle de las Mandolinas Pag. 93
Huguito, el viejo relojero que lleva cuarentaicinco años dando la hora en el mismo andén Pag. 100
La vida secreta de Banderita, el popular personaje bogotano que sale a toda hora en televisión Pag. 105
Marielita, la de El Viejo Almacén, añorada madre putativa de los enfermos por el tango Pag. 111
En La Última Lágrima, del Cementerio Central, a ritmo de "A la memoria
del muerto" y de "Nadie es eterno en el mundo" Pag. 118
Cheo Feliciano se hace lustrar de Rojitas, veterano embellecedor de calzado del Hotel Tequendama Pag. 127
Joaco, el último rey payaso de San Victorino Pag. 133
¿Quién, en sus 83 años, no ha degustado un plato de salchichas en El Bohemio? Pag. 144
Cuando La Rumbita vendía discos como arroz Pag. 147
Un clic, con todas las luces, a la memoria del gran Manuel H, en el centenario de su nacimiento Pag. 155
Nelson Parra, solitario escobita en tiempos insufribles de la cuarentena
del covid-19 Pag. 162
Septimazo bogotano, un espectáculo del absurdo, el asombro y la alucinación Pag. 166